El fraude de las neveras en los trasteros: "Hay vecinos que reclaman al seguro los alimentos estropeados por el corte de luz"

Vitoria

Detectar el uso irregular de la luz de los trasteros en las comunidades de vecinos es una tarea muy complicada. Así lo explica, Javier Montero, presidente de Administradores de Fincas de Gipuzkoa y Álava, que asegura que "normalmente hasta que no lo descubre un vecino y avisa, las comunidades no se dan cuenta".

Incluso, en alguna ocasión, explica que han recibido avisos de garajes en los que ha saltado la luz y los propietarios que tenían arcones con comida en el trastero han llamado para reclamar las pérdidas al seguro. "Llaman a la administración diciendo que ha saltado la luz y se ha estropeado lo que tenían en el arcón para que la compañía de seguros comunitaria les cubra las pérdidas", explica Javier Montero. Reclamaciones que "no se llegan a tramitar" porque el vecino está haciendo un uso del trastero "para algo a lo que no estaba destinado" y eso nunca lo cubre el seguro.

En Cadena Ser Vitoria contamos cómo las comunidades de vecinos contratan electricistas para detectar vecinos que usan la luz de los trasteros para enganchar neveras y este viernes hemos hablado con Javier Montero para ahondar en la problemática.

Sin norma específica contra el fraude

Al igual que David, el electricista que reveló a la Cadena Ser Vitoria este tipo de fraudes eléctricos, cuenta que se trata de una práctica habitual, sin embargo, solamente reciben "uno o dos avisos al año" por la dificultad para detectarlo en la factura de la luz. "Es muy difícil, y más en estos momentos en que la energía fluctúa tanto, si un mes te cobran 40 euros de diferencia, no le das importancia", señala.

Además, este tipo de fraudes eléctricos no se recoge en ninguna normativa específica, por lo tanto, las comunidades de vecinos solamente pueden acogerse a la Ley de Propiedad Horizontal argumentando que "se está haciendo un uso privado de unos elementos comunes sin tener derecho a ello".

En este sentido, Javier Montero explica que la solución más habitual es llegar a un acuerdo "amistoso" con el vecino y normalmente se acuerda poner lectores individuales en cada trastero de manera que la administración factura "los kW de más que consume cada propietario".