15 años de caminos escolares, ¿cuál es el balance en Bizkaia?

Bilbao

El Ayuntamiento de Leioa fue el primero que comenzó a contactar con los colegios en el año 2009, para poner en marcha en el municipio el programa 'Caminos Escolares'. Su proyecto ya avanzaba la necesidad de poner en marcha la filosofía de Francesco Tonucci, "convertir Leioa en la ciudad de los niños y de las niñas".

La iniciativa, avalada por la Carta Europea de los Derechos de los Peatones, tiene el objetivo de recuperar la armonía entre las personas y la ciudad sin depender del vehículo. ¿Cuáles son los pros y los contras? ¿Qué presupuesto hace falta para un camino escolar?

En Bizkaia, son 700 los colegios públicos, privados o concertados que se han adherido a este programa desde hace quince años, cuando arrancó en nuestro territorio.

Y, tras el frenazo de la pandemia, es un proyecto que sigue funcionando a pleno rendimiento: solo en Leioa, Derio y Bilbao hay unos 50 colegios que están desarrollando sus 'Caminos Escolares'.

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En Hoy por Hoy Bilbao-Bizkaia, Julián Maguna, responsable de proyectos de Solasgune -la empresa responsable de implantar los caminos escolares en varios municipios de Bizkaia-, ha explicado que el programa se basa en "empoderar desde el principio a los niños y a las niñas. Esto quiere decir: entrar en las aulas y abrirles la posibilidad que que vayan caminando a la escuela. Nosotros apostamos porque vayan con amigos y amigas, en principio sin una figura adulta".

El miedo, el primer obstáculo

Cuando un colegio decide explorar la posibilidad de adherirse a estos 'Caminos Escolares', en los padres se crea una sensación de sorpresa y cierto temor: "Al principio los padres tiene mucho miedo. Se preguntan '¿cómo se va a hacer?' y '¿cómo van a ir?'. En realidad, van con monitores y monitoras, con lo cual no es que vayan solos", ha explicado en nuestro programa Izaskun Boulandier, jefa de estudios de Derioko Herri Ikastetxea.

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"Me parece muy bonito porque hay que tranquilizar a las familias: se hace una reunión informativa, se les explica cómo va a ir todo, los padres y las madres, las familias, firman un compromiso...", ha añadido Izaskun.

Ivan Rodríguez, el alcalde de Leioa, la localidad pionera, ha explicado que "lo que está consiguiendo (el proyecto) es una transformación un poco sociológica. Esa mirada de los aitas y amas de estos niños y niñas, que verdaderamente están dejando de tener ese miedo para dar un poco de autonomía a los propios críos".