Memoria de la Montaña: "El primer televisor era de todo el pueblo, el alcalde abría y cerraba la sala"

Vitoria-Gasteiz

A lo largo de todo 2022 la cuadrilla de montaña alavesa puso en marcha un proyecto para recopilar, y que no se perdiese, la memoria oral del siglo XX. fundación Vital y la cuadrilla de montaña alavesa se dieron la mano para sacar adelante este proyecto que ha culminado con más de 20 horas de grabación, por parte de la empresa Labrit Patrimonio, y que recoge los testimonios de 8 vecinos de esta zona del territorio alavés. "Se trata de recoger esa memoria oral de las personas que están todavía hoy con nosotros, pero que en un futuro no estarán, para que sean ellos y ellas las que nos cuenten cómo era su día a día hace más de 60 y 70 años, que nos puedan contar cómo era su vida y que hacía", ha indicado, Anartz Gorrotxategi, el alcalde de Maeztu y presidente de la cuadrilla.

Este es un proyecto pionero en la Comunidad Autónoma Vasca, en el que se han recopilado 8 testimonios sobre conocimientos tradicionales, creencias, rituales, prácticas ceremoniales, representaciones, escenificaciones, formas de alimentación, manifestaciones sonoras y musicales, formas de sociabilidad colectiva y organizaciones.

Cambios durante el siglo XX

El documental 'Memoria oral del siglo XX en Montaña Alavesa' se podrá ver este próximo domingo en Campezo, con charla incluida con sus protagonistas que acudirán para contra más experiencias a quienes se acerquen a disfrutar de esta verdadera joya del patrimonio inmaterial de la comarca, ya que "son la generación, que aunque no se lo crean, más cambios han sufrido, desde una guerra civil, postguerra, pasar hambre, y todos los avances tecnológicos. Además de pasar de jugar en la calle con barro a tener asfalto, una televisión, agua corriente, etc...", ha destacado Anartz Gorrotxategi.

Se trata de salvaguardar el patrimonio inmaterial de una de las generaciones que más cambios ha vivido en la historia a través de sus vivencias, esas que han formado parte del imaginario colectivo; las costumbres, el vocabulario local, las fiestas o la intrahistoria de las localidades de la Montaña Alavesa. Gorrotxategi ha destacado que es un proyecto que por fin ve la luz y en el que "veníamos trabajando en la cuadrilla para salvaguardar todas las manifestaciones culturales de la comarca, y saber lo que hacíamos y de dónde veníamos".

Vivencias en primera persona

Nos hemos desplazado hasta el salón de actos de Campezo para charlar con algunos de sus protagonistas y rememorar su infancia y vivencias en pueblos como Pipaón, Genevilla o Antoñana, con hecho que les marcaron a ellos y ellas en primera persona y el desarrollo. Así, Maite Alonso, vecina de Pipaón, recuerda cómo "un gran acontecimiento", la llegada del agua corriente a las casas, ya que así "no se tenía que ir hasta la fuente en invierno a por el agua". Además rememora con cariño una infancia "de mucha felicidad en contacto con las personas y la naturaleza".

"La lavadora fue un hecho muy importante en nuestras vidas porque ya no había que ir a lavar al pozo, porque en verano con el calor bien, pero en invierno hacía mucho frío", ha explicado Agustina Etxagoyen, vecina de Genevilla.

Mientras, Juan José Acha, vecino de Pipaón, rememora la llegada de la televisión, "la primera televisión la compró el pueblo, y allí nos juntábamos todos. La llave la tenía el alcalde, y era el encargado de abrir y cerrar la sala". Además rememora como antes "no había cemento, y muy pocos balones. Jugábamos con un balón más bien cuadrado que redondo y las portería eran las puertas de las casas".