Los vecinos de la Zapa piden al Ayuntamiento que ponga "límites" a los after como el Woody
Gasteiz Txiki ha convocado a los afectados a una asamblea este viernes
:quality(70):focal(543x321:553x331)/cloudfront-eu-central-1.images.arcpublishing.com/prisaradio/7X3IZATNMJGQZML7PKHOMZPCKA.PNG)
Los vecinos de la Zapa hablan sobre el ruido y las peleas en el pub Woody
07:59
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1674670175613/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Vitoria
La problemática con el bar Woody de la calle Zapatería continúa. Desde agosto de 2022, fecha en la que el local se convirtió en after, los vecinos se están movilizando por los constantes problemas de peleas y ruido que generan los clientes del local. Gasteiz Txiki ha convocado este viernes, a las 18:00 horas, a los afectados de la zona a una asamblea.
En noviembre el bar ya acumulaba multas por valor de 5.600 euros y lo último es que desde el Ayuntamiento les han precintado el equipo de sonido. Idoia, una de las vecinas cuenta que la situación no mejora. "Estamos sumidos en la desesperación sumado a una inseguridad porque nos da miedo salir del portal, hay gente insultándonos a las vecinas y peleándose", señala.
Los técnicos del Ayuntamiento de Vitoria advirtieron al local en noviembre de que no estaba insonorizado y no cumplía "ninguna regla de seguridad porque es un sótano con escaleras que no tiene ni salida de emergencia". En este sentido, Idoia denuncia que a los vecinos de la zona les sorprende "cómo puede seguir abierto saltándose las normativas".
Desde Gasteiz Txiki, Manu Arakama, explica que quieren solucionar el problema a través de la mediación, sin embargo, señala que "por parte del gerente del local no hay ninguna intención de solucionar el problema".
La asociación de vecinos entiende que la solución pasa por el Ayuntamiento que "tiene que tener una implicación mayor" y consideran que una solución podría ser estudiar cómo regular este tipo de actividades y "ver de qué forma se puede poner límites". "Lo sensato es entender que este tipo de actividades con estos horarios genera unas molestias que hacen incompatibles la actividad económica de la hostelería con la vida normalizada de los ciudadanos", señala.
En este sentido, Idoia, una de las vecinas de la calle Zapatería, aclara que no están en contra de actividades de ocio en el casco, sino que se trata de "la gestión que están haciendo. "No hay un ápice de cambio y sigue acumulando multas por ruido", concluye.
