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El Parlamento Vasco da el visto bueno definitivo a los presupuestos de Euskadi con el rechazo de toda la oposición

El resto de grupos acusa a PNV y PSE de "maquillar" la ausencia de apoyos externos, y estos les reprochan su actitud "destructiva"

VITORIA, 23/12/2022.-El lehendakari, Iñigo Urkullu, a su llegada a la sede del Parlamento Vasco en Vitoria, para participar en el pleno que celebra la Cámara este jueves para aprobar los presupuestos de su Gobierno para 2023, que ascienden a 14.250,7 millones de euros, 1.142 millones más que este año.EFE/ David Aguilar / David Aguilar EFE

BIlbao

El Parlamento Vasco ha dado este viernes el visto bueno definitivo a los presupuestos de Euskadi para 2023, que han sido aprobados con el único apoyo de los grupos que apoyan al Gobierno autonómico (PNV y PSE-EE), mientras que EH Bildu, Elkarrekin Podemos-IU, PP+Cs y el Grupo Mixto-Vox han votado en contra.

De esa forma, las cuentas para el próximo año --que ascienden a 14.250 millones de euros-- han salido adelante gracias a la mayoría absoluta que suman 'jeltzales' y socialistas en el pleno de la Cámara, con 41 escaños sobre un total de 75.

El consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, se ha mostrado "muy satisfecho" con la aprobación definitiva del proyecto presupuestario, pese a que --según ha lamentado en declaraciones a los periodistas a su llegada al Parlamento-- solo cuente con el apoyo del PNV y el PSE.

Azpiazu ha asegurado que el Gobierno ha hecho un "esfuerzo importante" para tratar de lograr el respaldo de algún grupo de la oposición. Como muestra de esa "voluntad" de acuerdo, ha recordado que el PNV y el PSE han aceptado enmiendas del resto de grupos por un importe cercano a los 40 millones de euros. Pese a mostrar su deseo de que la oposición pudiera "recapacitar" durante la sesión, ha lamentado que a pesar de la aceptación de estas enmiendas "no ha sido posible" ampliar los apoyos a las cuentas.

En todo caso, ha manifestado que los presupuestos --que destinan un 76% de los recursos disponibles a gasto social y que incrementan en un 14,8% la cuantía destinada a inversiones públicas-- están diseñados para dar respuesta a una situación marcada por "un marco de incertidumbre y ralentización económica".

Falta de valentía

En el transcurso del debate, la parlamentaria de EH Bildu Leire Pinedo ha reprochado al Gobierno Vasco su "falta de valentía" para elaborar unos presupuestos a la altura de la actual situación de "incertidumbre", limitándose a diseñar unas cuentas que no hacen sino aportar "más de lo mismo".

Pinedo, que ha recordado la "creciente preocupación" de los ciudadanos por la precariedad laboral, la sanidad pública, o la pérdida de capacidad adquisitiva, ha advertido de que además de las medidas "urgentes" que se puedan adoptar ante estos problemas, es necesario impulsar cambios "estructurales".

Por ese motivo, ha lamentado que el Gobierno no haya aceptado la oferta de "colaboración" de su grupo para impulsar una política "más justa" y para incrementar los recursos destinados a las familias, a la sanidad pública y a los sectores económicos más afectados por la crisis. Además, ha denunciado que la decisión de PNV y PSE de aceptar algunas enmiendas de la oposición solo responden al objetivo de "maquillar la foto final de que no han podido sumar a nadie a su proyecto presupuestario".

La portavoz de Elkarrekin Podemos-IU, Miren Gorrotxategi, ha reprochado al Gobierno Vasco sus "excusas" para no aceptar la oferta de acuerdo presupuestario que le trasladó su grupo, un rechazo que ha atribuido al hecho de que el Ejecutivo y la coalición progresista defienden modelos políticos "diferentes".

Osakidetza y educación

De esa forma, ha subrayado que E-Podemos defiende la centralidad de la escuela pública en el sistema educativo y el refuerzo de la sanidad pública, mientras el Gobierno sigue destinando recursos para mantener el "gran peso" de la educación privada concertada y sigue dando pasos hacia la "privatización" de Osakidetza.

También ha censurado la negativa del Ejecutivo autonómico a aceptar la creación de una empresa pública de energía, una posición con la que --según ha dicho-- el Gobierno apoya al "oligopolio" que controla este sector. A su vez, ha lamentado el rechazo a las propuestas de su grupo para avanzar en la progresividad fiscal.

El parlamentario de PP+Cs Luis Gordillo ha asegurado que su grupo acudió al proceso de negociación abierto el pasado mes de noviembre por el consejero de Economía y Hacienda con una posición "flexible" y con voluntad de acuerdo.

Un bien superior

De hecho, ha afirmado que PP+Cs estaba dispuesto a actuar con "generosidad" y apoyar unas cuentas que en buena parte "no compartía", si a cambio se aceptaba impulsar una bajada de impuestos, dado que consideraba que eso era un "bien superior" por el que merecía la pena llegar a un acuerdo.

No obstante, ha lamentado que el Gobierno no aceptara finalmente su petición, si bien ha considerado positivo que se hayan admitido algunas de las enmiendas de su grupo.

La única representante del Grupo Mixto-Vox, Amaia Martínez, ha denunciado que estos presupuestos están marcados por cuestiones "ideológicas", como la perspectiva de género y el "hembrismo", y ha asegurado que su grupo no contribuirá a "blanquear los desatinos presupuestarios" del Gobierno Vasco, pese a los "parches" introducidos en las cuentas en forma de enmiendas.

Por parte de los grupos que apoyan al Gobierno Vasco, la parlamentaria del PNV Alaitz Zabala ha acusado a la oposición de mantener una actitud "destructiva" e "irresponsable", desde la posición "fácil y cómoda" en la que permanecen desde su situación "minoritaria" en el Parlamento.

"Empieza en VOX y acaba en EH BILDU"

"La minoría de esta Cámara, el arco que empieza en Vox y acaba en EH Bildu, han votado en contra de unos presupuestos que aumentan en un 20% las partidas para igualdad y reservan un 80% del gasto para políticas sociales", ha lamentado, tras recordar, además, que las cuentas prevén un importante incremento de personal en Osakidetza y educación.

Zabala ha cuestionado que EH Bildu haya tenido una verdadera disposición de acordar las cuentas, mientras en el caso de Elkarrekin Podemos-IU, ha afirmado que sus propuestas supondrían "cambiar de arriba abajo" el modelo que se ha implantado en Euskadi en los últimos 40 años. Asimismo, ha reprochado a PP+Cs la "falta de rigor" de sus enmiendas, sobre las que ha afirmado que no responden al principio de "equilibrio presupuestario".

La parlamentaria del PSE-EE Sonia Pérez ha reprochado a EH Bildu --formación que el año pasado llegó a un acuerdo presupuestario con el Gobierno Vasco-- que haya "cambiado de actitud" hasta el punto de "no querer siquiera pactar sus propias enmiendas parciales", una posición que ha vinculado con la proximidad de las elecciones municipales y forales de mayo.

Pérez también ha lamentado que Elkarrekin Podemos-IU haya "perdido la oportunidad de apoyar unos presupuestos que convergen con muchas de las iniciativas" que defiende la propia coalición.

En el caso de PP+Cs, ha criticado que centre sus demandas en reclamar una bajada "generalizada" de impuestos, algo que --según ha destacado-- responde al modelo de "recorte" de servicios públicos que propugna esa formación, del que se ha desmarcado para posicionarse en favor de "un modelo de servicios públicos de calidad".

 
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