Campaña electoral

Asturias
Comienza la campaña electoral, la oficial, porque la oficiosa hace ya semanas, o más bien meses, que se viene desarrollando. Una campaña, esta de los comicios generales del día 28, que tendrá continuidad inmediata con otra, la de las elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo. Todo, así, en el plazo de cuatro semanas, sin tiempo para digerir tanta propuesta política, ¿o más bien habría que decir tanta ocurrencia y desatino?
Asturias ha visto reducida su representación en el Congreso. Los asturianos elegirán siete diputados en lugar de los ocho de las últimas consultas electorales. Hasta tres escaños en la Cámara Baja ha perdido la provincia desde la instauración de la democracia en 1975, cuando en la Carrera de San Jerónimo había diez representantes asturianos.
Así y todo puede pasar que por primera vez en la comunidad autónoma haya diputados de la región en Madrid de hasta cinco candidaturas. E incluso cabe la posibilidad más o menos lógica de que hubiera parlamentarios de seis partidos, uno más que ahora. Lo normal durante muchos años era que tres, o como máximo cuatro formaciones políticas se adjudicaran los escaños en juego: PSOE , PP e IU (antes PC), a los que habría que añadir años atrás a UCD y CDS. Pero la irrupción de nuevos partidos ha alterado el mapa político en los últimos años. Así, en 2016, además de socialistas y populares lograron presencia en el Congreso Podemos y Ciudadanos, y también Foro (que concurrió en coalición con los populares). IU, que se presentó en la misma lista que el grupo de Pablo Iglesias quedó fuera.
Ahora, según la encuesta del CIS, cuatro listas tienen aseguradas al menos un diputado: PSOE, PP, Ciudadanos y Podemos. Otros sondeos aseguran que también logrará escaño Vox. Pero es que el cambio de escenario político es tan profundo que incluso no se puede descartar (aunque sea una hipótesis muy pero que muy remota) que los siete diputados asturianos sean de partidos diferentes. Del PSOE, PP, Ciudadanos, Vox, Podemos, Foro e IU. Para eso tendría que producirse primeramente el sorpresón de que tanto PP-Foro como Podemos-IU quedaran por delante del PSOE.