El Ayuntamiento buscará una nueva ubicación para la tira de contar del Mercado de Colón si no funciona en unas semanas

València

El vecindario del entorno del Mercado de Colón se ha encontrado este martes con los agricultores y agricultoras de la tira de contar, que han instalado por primera vez las paradas en las proximidades del recinto. La iniciativa ha suscitado críticas entre los comerciantes de dentro del Mercado porque creen que les va a hacer "competencia desleal", los agricultores defienden que traerá beneficios para todos. El concejal de Agricultura, Alejandro Ramón, ha señalado que si no se consiguen los objetivos esperados, se buscará otra ubicación.

El Mercado de Colón cuenta con diferentes paradas, una de ellas de frutas y verduras, la más afectada. Todos los comerciantes de dentro del recinto han cerrado este martes sus locales en solidaridad con Aurelio Comes, el propietario de ese puesto.

El representante de los comerciantes de Colón, José Manuel Manglano, ha criticado que esa propuesta les va a hacer competencia ilícita porque ha lamentado que quienes ubican sus puestos en la tira de contar pagan 1,82 €, mientras que ellos desembolsan tres veces más de lo que se paga en los mercados municipales.

Manglano ha pedido que se ubique a los agricultores dentro de los espacios municipales que tienen paradas vacías: "València es una de las ciudades con más cantidad de mercados municipales por habitante del país, ¿por qué no los meten dentro? Serán muy bien recibidos".

Además, ha señalado que no hay diferencia entre un tomate cultivado de manera tradicional o uno cultivado de manera ecológica: "La diferencia de verdad está con las grandes superficies".

Al respecto, Aurelio Comes, el principal afectado, ha indicado que "cada uno trabaja como quiere" y ha agradecido el gesto a sus compañeros. Todavía no sabe cómo le puede afectar a nivel económico la tira de contar, pero ha señalado que "no está bien hecho": "Mi madre me crio debajo de una tomatera, somos la cuarta generación. Eso avala que tenemos calidad, buen servicio y buen humor".

Los agricultores entienden las quejas

Fuera del mercado los agricultores y agricultoras vendían acelgas, zanahorias, brócoli o lechuga, todo de temporada. Miquel es de la Vall d'Albaida y su actividad principal es el huerto. Vende cajas de fruta y verdura a domicilio o a distribuidoras y asociaciones de consumidores y ha defendido que hacía falta un mercado así "porque en todas las ciudades de Europa hay mercadillos ecológicos y aquí en València aún no había".

Susanna, otra agricultora, ha destacado que ella viene del mundo agrario y solo quiere vender "a precios justos" porque si no se les cuida, lamenta, "no va a haber relevo generacional". Ambos entienden las quejas de los comerciantes, pero confían en que ayude a promocionar al propio Mercado de Colón.

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Como curiosidad, Aurelio, el propietario de la parada de verduras, se quejaba de que fuera los agricultores venden el perejil a 1,2 €, mientras que él lo regala. Al final, explican los agricultores, lo terminan regalando. "Si vemos que no lo vamos a vender pues lo regalamos, para que no se eche a perder", concluyen.

El emplazamiento no es definitivo

El concejal de agricultura y huerta, Alejandro Ramón, se ha acercado hasta allí y ha defendido la ubicación elegida. En su opinión, los propios agricultores habían solicitado la zona "porque querían un lugar céntrico". Además, como ventajas, también ha destacado la peatonalización de la calle y la inexistencia de un mercado municipal cerca porque el Mercado de Colón es "un gastro mercado, una galería comercial".

El concejal confía en que se creen sinergias entre los vendedores de dentro y los de fuera: "Confiamos en que quienes compren aquí luego hagan gasto en cafeterías, bares, panaderías y comercio local".

En cualquier caso, ha destacado que si en unas semanas no se consiguen esas alianzas volverán a sentarse y a buscar "una nueva ubicación próxima o una calle próxima donde poder trasladar el mercado".

Según Ramón, el objetivo es permitir a los agricultores la venta directa "lo que les permite obtener un margen de beneficio más grande que si venden a intermediarios".

Los populares critican que se consuma "una cacicada"

La portavoz del PP en el Ayuntamiento de València y candidata a la Alcaldía, María José Catalá, ha asegurado que este martes se consuma "una cacicada que enfrenta a agricultores y vendedores" y ha criticado que el Ayuntamiento "no hace más que dividir". Catalá ha pedido al Consistorio que deje de generar conflictos y ha defendido que los populares apuestan por la convivencia.