La Plataforma contra la Pobreza pide al alcalde que ponga al frente de Acción Social a una persona que "reconstruya los puentes rotos" con las entidades sociales

Alicante

La Plataforma contra la Exclusión y la Pobreza de Alicante exige al Ayuntamiento más diálogo para "reconstruir los puentes rotos" con las entidades sociales. Más allá de cifras, la realidad, trasladan, es mucho "más compleja" y recuerdan que hay "otras verdades".

Su portavoz, Kike Romá, ha remarcado en Hoy por Hoy Alicante que la pobreza y exclusión en Alicante está en el 30%, tres puntos por encima de la media estatal, y que se incrementa hasta entre el 33 y el 35% entre los niños y niñas. Y, advierte: esos porcentajes van en aumento.

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No lo dice él, lo dicen aquellas entidades que están "en primera línea", como Cruz Roja o Cáritas. Sus resultados anuales en asistencias e intervenciones en población vulnerable en Alicante contradicen a las cifras del Anuario 2022 de Acción Social que presentó la semana pasada la edil Julia Llopis. "No cuestionamos las cifras", explica Romá, pero, "desde luego, no reflejan toda la realidad".

Alerta además de que estos porcentajes de pobreza y exclusión "se incrementan tras cada crisis, porque la recuperación es inversa", es decir, "quienes tienen acumulan cada vez más y quienes no tienen, cada vez tienen menos". Las entidades sociales cada vez atienden a más personas en riesgo que llegan con nuevos perfiles como personas con trabajo que no pueden hacer frente a las exigencias vitales.

Una realidad que no se afronta desde el Ayuntamiento alicantino porque "no hay comunicación con Llopis", mientras las bolsas de pobreza crecen en los barrios interiores. Por eso, y porque "desprecia a las entidades sociales y ha roto toda la comunicación, llegando incluso al insulto", pide su cese.

"No se puede vender una ciudad pionera en inteligencia artificial mientas se empobrecen las áreas que no están en el frente litoral". Tampoco "alardear" de inversiones como se hizo, dice, en la presentación del Anuario 2022 de Acción Social, cuando se han devuelto 330.000 euros en ayudas a la vivienda para personas vulnerables o medio millón de euros para proyectos sociales. Está convencido de que estas actuaciones tienen una clara "intencionalidad política".