Ximo Puig y Ascer se unen para reclamar la financiación del 30% de sobrecoste del gas

Bolonia

Ximo Puig y la patronal azulejera Ascer han mantenido un almuerzo de trabajo para acordar cómo trasladarle al gobierno de España la demanda de que es necesario que amplíe las ayudas al sector cerámico, ya que es un sector estratégico. Que implemente ayudas como han hecho Alemania Francie e Italia que es el principal competidor de la industria valenciana. El presidente Puig insiste en que se pueden estuidar varias vias como loas creditos ico, o bonificaciones pero tiene que hacerlo.

En este sentido, Puig ha declarado que "el Gobierno de España debe intentar primar el desorbitado coste del gas, ya que en Italia se han empezado a tomar medidas para financiar el 30% de los sobrecostes". La visita a Cersaie sirve para alinearse con la industria, para "pasar esta transición de precios del gas que hacen inviable al sector a través de ayudas directas al gas u otro tipo de ayudas", ha señalado el president.

A su juicio, en Europa "no puede haber países que tengan más ayudas que otros" y por tanto debe haber alineamiento en las mismas, y si Europa permite a los gobiernos nacionales tomar una serie de medidas, cada Ejecutivo tiene que apoyar "de manera semejante".

También se ha referido al estado actual de la cerámica con perspectiva de "mantener el producto y su posicionamiento en el mercado, pero en el marco de una incertidumbre provocada por los precios del gas".

Un compromiso de completar las ayudas de 400.000 euros

Ximo Puig también le ha trasladado a Ascer su compromiso de complementar las ayudas de hasta 400.000 euros que ha anunciado el gobierno, hasta alcanzar el tope máximo que marca la Unión Europea sin necesidad de pedir autorización: 500.000 euros. Esta dependerá de la cuantía que reciban del Gobierno, aunque Puig aclara que no tendrán que cumplir otros requisitos que los marcados desde el ejecutivo central.

Por su parte Vicente Nomdedeu, presidente de Ascer, ve "con muy buenos ojos esta idea de la Generalitat , aunque afirma que "es necesario que el Gobierno de España se plantee ayudar a este sector estratégico "que nunca ha pedido ni ha recibido ayudas". Las inversiones siempre han sido privadas, y aunque reconoce que la industria de la cerámica no es la única afectada por el incremento de la energía, cree que el gobierno debería tener en cuenta su peso en el PIB español.

Finalmente, el balance de la feria es positivo,y aunque todavía es pronto para sacar conclusiones parece que se ha superado la crisis de la demanda, ques otra que la crisis paralela de la energía.