Greenpeace denuncia subvenciones encubiertas de vuelos no rentables a Castellón con más de 10 millones de euros, en plena emergencia climática
La ONG señala que los vuelos de Air Nostrum a Madrid y Sevilla no están considerados como Obligación de Servicio Público, por lo que son trayectos que deberían hacerse en tren
(ACN)
Castellón
Un informe elaborado por la ONG contabiliza 10 millones de euros en subvenciones encubiertas a través de la sociedad pública Aeropuerto de Castellón (Aerocas) entre los años 2020 y 2023. Aerocas está gestionada directamente por la Generalitat, que es la propietaria de la infraestructura.
Greenpeace advierte que los vuelos de Air Nostrum a Madrid y Sevilla no están considerados como Obligación de Servicio Público, por lo que son trayectos que deberían hacerse en tren, por lo que exige al gobierno valenciano que deje de subvencionar al avión, que consideran el modo de transporte más contaminante, y dedique estos recursos a promover un modelo de movilidad que no incremente las emisiones de CO₂.
La investigación destaca el caso del Aeropuerto de Castellón, que recibe importantes subvenciones en comparación con los aeropuertos de Valencia-Manises y Alicante-Elche, aunque en este caso ambos forman parte de la red estatal Aena. sEGÚN LA onga, La Generalitat Valenciana, a través de la Sociedad Pública Aeropuerto de Castellón (AEROCAS) ha concedido 3 millones en subvenciones directas a Air Nostrum y 6 millones a WizzAir. Una práctica vigilada de cerca por el Tribunal de Cuentas Europeo, según mantiene Greenpeace, al suponer una perturbación de los principios de libre competencia frente a otros medios de transporte en aquellas rutas que no están declaradas como Obligaciones de Servicio Público (OSP).
A través de su campaña de movilidad, Greenpeace llama la atención sobre el impacto del sector aéreo en las emisiones de CO₂ y denuncia que en plena emergencia climática las administraciones sigan promoviendo los viajes en avión a pesar de ser el transporte más contaminante por persona transportada. Como ejemplo, alguien que viaje en avión de Castellón a Madrid incluyendo los 33 km en coche hasta el aeropuerto estará emitiendo 130 kg de CO₂; mientras que el mismo viaje en un AVE 100 % eléctrico, supone solo 8 kg de CO2.
Cabe recordar que el vuelo a Madrid está previsto que entre en funcionamiento, a partir del próximo mes de octubre en el Aeropuerto de Castellón.
No obstante, la alternativa que propone Greenpeace al avión, como es el caso del tren, sufre desde este verano cambios en su forma de funcionar, porque Renfe y Adif han eliminado parte de las conexiones directas que unen la provincia de Castellón con Madrid, debido a las obras del Corredor Mediterráneo. Una situación que continuará así, por lo menos, hasta el mes de octubre.
