Estudiantes de la Escuela de Caminos de Madrid se convierten en guías turísticos

Madrid

Jorge Bernabéu es uno de esos profesores, como los vemos en las películas, interesados en que sus estudiantes sean los protagonistas y que disfruten aprendiendo. No tiene apuntes amarilleados por el tiempo con las esquinas dobladas de tanto pasar las hojas. De hecho no tiene ni bloc de notas. Lleva una Tablet. Aun así, se complica para dar la asignatura. El curso pasado se empeñó en enseñarles los puentes de Madrid a sus alumnos; este curso los ha cambiado por estaciones. Tiene noventa alumnos que en parejas han elegido, cada una, una estación de tren, una de metro o un intercambiador para estudiar. Pero no sólo eso. Estudiarán cómo, cuándo, de qué manera se construyeron y servirán de guías para aquellos que tengan interés por conocerlos. De momento van a grabar vídeos para hacer visitas virtuales.

Metidos en el ajo están Metro de Madrid y Adif que han puesto todo tipo de facilidades porque pocas veces se han encontrado con un proyecto de estas características en que estudiantes de Caminos se interesan por las estaciones, para hacerlas suyas, y encima darlas a conocer.

Como estaciones de ferrocarril les interesa, como no puede ser de otra manera la Estación de Atocha - Almudena Grandes, la Estación de Chamartín - Clara Campoamor, la Estación de Delicias, que desde 1984 es el Museo del Ferrocarril o la antigua Estación del Norte, que desde hace más de veinticinco años se conoce como el Intercambiador de Príncipe Pío. Este último les sirvió a los estudiantes como lugar de pruebas. Un tubo de ensayo muy particular. Se presentó allí, un grupo nutrido y tal nipones con sus cámaras en ristre tomaron el intercambiador. "Al cabo del año pasan por aquí 42 millones de pasajeros" explica Javier Alcolea, estudiante del Master de Ingenieros de Caminos, que nos hace de cicerone en esta visita para la radio. Uno se lo puede creer con los ojos cerrados, sólo con el sonido del vaivén de los trenes del metro. La estación de Cercanías, en cambio sólo atrae a una sexta parte de esos pasajeros de metro. Laura Brull, otra de las estudiantes, Master en Gestión del Patrimonio, apunta que "la ingeniería civil también puede ser estética", cosa con la que estamos plenamente de acuerdo.

Acabamos estas líneas, inspiradas por un profe, con unos versos que Gloria Fuertes escribió. Al parecer, nos cuenta este mismo profe, que ella siempre tomaba el tren en la Estación del Norte cuando iba a visitar a su familia en Galicia. Es la mejor manera de terminar :

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