María Hervás: "El reto de las mujeres de ahora es llevar a la práctica la teoría que conocemos"

Para María Hervás, no definirse significa estar en sintonía con la vida, porque nunca vamos a ser capaces de atrapar algo. "Todo se nos escurre entre los dedos. Es como el río del que hablaba Heráclito, que siempre se está moviendo... Tú crees que lo conoces pero siempre es distinto agua", explica.

Esta semana, se encuentra sobre las tablas del Teatro María Guerrero protagonizando 'Yerma' de Federico García Lorca, una de las obras que forma parte de la trilogía rural que el granadino escribió junto con 'Bodas de sangre' y 'La casa de Bernarda Alba'. Se trata de un montaje dirigido por Juan Carlos Martel Bayod, que después de triunfar en el Lliure de Barcelona, ha llegado a Madrid con todas las entradas vendidas.

Este poema trágico cuenta el conflicto interno de Yerma, quien desea con todas su fuerzas convertirse en madre, sin llegar nunca a conseguirlo. Durante la obra, se pierde en la agonía y la obsesión, pero también emprende una lucha contra las imposiciones de la sociedad. "Después de interpretar tanto a Yerma, creo que en realidad su deseo no es tanto ser madre, como ser libre. Antes, la única manera que tenían las mujeres de realizar sus sueños o cumplir con sus expectativas era teniendo un hijo en el que proyectar todo aquello que la sociedad no les permitía hacer a ellas, sobre todo si era hombre", explica y, a continuación, recita la estrofa:

Yo quiero subir al monte, no tengo pies, déjame andar y desahogarme

"Ella clama por la vida, por hacer, por realizarse, por comunicarse con los demás... Es una Yerma "muy contemporánea", en la que se puede mirar cualquier mujer",explica. En su opinión, la mujer como concepto siempre se ha idealizado: "cuando escribían sobre nosotras, lo hacían desde lo que ellos creían que era la mujer... No le han dado permiso a la mujeres de ser lo que en realidad son. El gran reto que tenemos las de ahora es llevar a la práctica la teoría que conocemos", sentencia.

Para Hervás, Lorca es uno de los escritores españoles más vangaurdistas, un pensador absolutamente moderno, que va a poder seguir representándose año tras año, siglo tras siglo. "Se mete en las ranuras de todo aquello que está dentro del ser humano, y de lo que no se habla", asegura.

En Yerma, une mito y realidad, para retratar a una mujer a la vez oprimida y liberada, mostrándonos una diversa gama de feminidades y masculinidades. Y lo hace desde un desde un dolor y una sensibilidad muy concretos... La de un hombre homosexual, marginado por la sociedad de principios de siglo XX", apunta Hervás. Por ello, la actriz asegura que es un error cuando la gente quiere poetizarlo demasiado : "no hay que subir sus palabras al aire, la dificultad está en bajarlas a la carne y al dolor".

En este sentido, asegura que uno de los principales retos de interpretar la obra ha sido entrar en el idioma lorquiano. "Es un lenguaje en el que los personajes se expresan con mucha poesía, por lo que se corre el riesgo de ir muy arriba y que sea demasiado. Pero por otro lado, si te quedas más abajo, no retuerce los huesos. Por eso, encontrar ese código en el que funciona es muy difícil, como si fuese un lenguaje aparte", asegura.

María Hervás también ha protagonizado ‘Jauría’, la obra dirigida por Miguel del Arco, escrita a partir de la transcripción del juicio de "La manada", y de las declaraciones de la víctima y de los acusados. Cuenta que fue "un trabajo interpretativo durísimo", tras el que tuvo que dejar de hacer teatro durante un año para recupersarse.

Además, acaba de estrenar 'Machos Alfa' en Netflix, comedia de los hermanos Laura y Alberto Caballero que cuenta cómo cuatro hombres ven cómo sus privilegios concedidos por su género se van desvaneciendo con los cambios sociales, sin quedarles otra opción que adaptarse a los nuevos tiempos.