Las claves para trasladar el espíritu navideño a la empresa: hay vida más allá de las cenas

Llega la Navidad, y con ello la época del año en que acumulamos varias comidas -o cenas- con amigos, y también con compañeros de la empresa para la que trabajamos. Resulta, en ocasiones, complicado cuadrar la agenda para poder atender a todas ellas. Es un clásico, aunque no tiene por qué ser la única opción. «Me parece una opción estupenda, pero no todo el mundo se siente igual de cómodo» -nos cuenta María Sánchez-Migallón, directora de Formación de OyE (Oportunidades y Estrategias). Existen, por tanto, otras alternativas para poder trasladar todo ese espíritu navideño a nuestro mundo laboral. Porque, como dice Sánchez-Migallón, debemos sentir la empresa para la que trabajamos como una especie de «segunda familia a la que tenemos que cuidar». Es decir, intentar llevar los valores que trae consigo la Navidad -generosidad o alegría- a la empresa y buscar ese bienestar. Para poder conseguirlo, la directora de Formación de OyE nos da algunas claves: -Regalar cestas de Navidad. Para Sánchez-Migallón, no se trata de un gasto, sino de una «inversión en salario emocional». Es un agradecimiento al trabajador/a y genera sentimiento de pertenencia. -Decorar la oficina con adornos navideños. Aquí se busca la implicación de todos los trabajadores y da lugar a ser creativo. -Instalar un Photocall Navideño. Hacerse una foto de equipo también puede aportar aspectos positivos. Esas fotos que hacemos cada año podemos colocarla en la oficina y ver cómo evoluciona la plantilla. -Por último, y no menos importante, actividades en grupo. Conocidas también como «Team Building». Esto consiste en reunir a los trabajadores en torno a una temática y someterlos a pruebas en grupo. Sánchez-Migallón señala que aquí se trabajan muchas habilidades como la «comunicación, la negociación o el liderazgo, además de pasárselo bomba».