Verano de récords en Toledo
Las temperaturas medias de julio y agosto registradas han sido de 30.6 y 29.0 ºC, respectivamente
Toledo
Toledo. Se acaba un verano muy peculiar en nuestras vidas y es bueno reflexionar sobre qué está pasando. Dicen que cuando el Grajo vuela alto…. pues eso, que hace mucho calor. Estas aves son indicadoras del ambiente que nos rodea y seguro que este verano ha estado haciendo sus vuelos acrobáticos en los Montes de Toledo a mucha altura.
El verano de 2022 permanecerá en nuestros recuerdos como uno de los más cálidos que se ha vivido en la provincia de Toledo. Desde las noticias se nos bombardea mucho sobre el problema del cambio climático, pero ¿qué nos indican los datos meteorológicos? En ciencia, los datos son primordiales para obtener conclusiones y así afirmar hipótesis o explicaciones de lo que está pasando en nuestro entorno. Los datos son fundamentales para hacer buena ciencia, siempre que se toman de forma sistemática y con metodologías establecidas.
El cambio climático, como todos debemos saber ya, es un problema global, es decir, a nivel del planeta Tierra, pero que tiene repercusiones a escala local, en este caso en Toledo.
Las edificaciones tradicionales del casco histórico de Toledo están adaptadas para estos veranos tórridos y secos. Gracias a sus patios es posible combatir el calor veraniego. Pero, ¿estamos preparados para el nuevo escenario que se nos presenta?
En general, tiramos de memoria a la hora de hablar del tiempo, pero no podemos sacar conclusiones fiables si no usamos los datos, como antes he indicado. En Toledo ciudad, se dispone de información histórica bajo el mismo protocolo de toma de datos implantado por la AEMET desde 1920. Se dispone de datos meteorológicos a nivel diario que se han tomado en dos observatorios (Toledo Lorenzana y el actual observatorio en la salida de la carretera de Torrijos). Vamos a ver que nos indican los datos de temperatura ambiente, dejando para otro día el asunto de la tan ansiada lluvia.
La temperatura ambiente es tomada bajo unas condiciones específicas dentro de las garitas meteorológicas a metro y medio del suelo (no asfaltado) y a la sombra (es decir, sin recibir radiación solar). Cada día se toma la mínima y máxima del día y con estos valores de calcula la temperatura media diaria. En definitiva, la temperatura media mensual será la media de estos valores diarios.
Las temperaturas medias de julio y agosto registradas han sido de 30.6 y 29.0 ºC, respectivamente. Estos valores son los más altos registrados desde 1920 para estos dos meses. Es decir, este verano ha sido un verano de récords en Toledo. Todos los días de estos dos meses, como es habitual en Toledo, la temperatura media ha estado por encima de los 30 ºC. Pero desde 1980 se observa un incremento gradual muy marcado de estas temperaturas en nuestra ciudad.
El cambio climático ha venido para quedarse y habrá que ir pensando en tomar medidas para mitigar y adaptarse a nivel local, ya que afecta a todos los sectores económicos de la ciudad. Un claro ejemplo es el impacto que tiene sobre los turistas, ¿Quién quiere visitar la ciudad imperial bajo estas condiciones? Las soluciones están a distinta escala, pero la primordial es la que adopta el ciudadano para reducir sus niveles de emisión de gases con efecto invernadero, principal causa del cambio climático como la ciencia nos indica utilizando el análisis de los datos que se dispone
