Toledo

La vuelta al cole ya está aquí. En Castilla-La Mancha el curso va a contar con 399.050 alumno y 32.753 docentes repartidos en 1.214 centros educativos.

Curso escolar con aroma a cuesta de enero por el alza de los precios que también llegan al material escolar y ropa y que también está marcado por el final de las restricciones en los centros por la pandemia.

En 'La Ventana de Castilla-La Mancha' hemos querido analizar este comienzo de curso 2022/2023 con Martín Navarro, presidente en la región del sindicato de enseñanza ANPE y con María Sánchez, secretaria de CONFAPA Castilla-La Mancha.

Nueva ley y alza de precios

Desde ANPE recuerdan que se trata de un curso que "viene marcado por la aplicación del desarrollo normativa de LOMLOE" que aseguran, "está generando en los centros educativos una cantidad ingente de burocracia". Navarro, también destaca la ausencia de las medidas 'covid' y lamenta los "recortes educativos" que se mantienen en la enseñanza pública desde el año 2012.

Por su parte, desde CONFAPA, Sánchez asegura que muchas familias, por lo menos "la mitad", viven este comienzo de curso con "incertidumbre" por el cambio de ley que entra en vigor en los cursos impares y pide más pedagogía por parte de las administraciones y los centros para conocer qué cambios van a suponer. Añade que también hay "preocupación" entre las familias por "la situación económica" con una "inflación disparada" que hace que "la vuelta al cole sea más cara para todos". En este sentido entiende que debe recuperarse la gratuidad de los libros de textos aunque recuerda que este curso se ha ampliado el número de becas.

¿La situación económica repercute en el fracaso escolar?

Precisamente, preguntados sobre si un niño o una niña de una familia con menos recursos tiene más posibilidades de caer en el fracaso escolar, María Sánchez entiende que "sí", aunque "el sistema no debería dejarle caer". Pone como ejemplo las familias que no tienen recursos para darle un su hijo o hija apoyo con los deberes por las tardes, por ello, recuerda que desde CONFAPA vienen reclamado desde hace años el fin de los deberes escolares "porque no todos los niños tienen las mismas opciones por la tarde de que les ayuden en casa o que les paguen unas clases".

Desde ANPE, Martín Navarro ha querido recordar que durante la pandemia había un 10% de hogares con "brecha digital", es decir, que no tenían conexión a Internet. Añade que cuando no se disponen de los suficientes recursos, son los centros educativos los que "tienen que dar respuesta" a esa necesidad que requiere el alumnado que necesita de un apoyo educativo. Por ello, pide más profesorado en los centros para "atender individualmente las necesidades que tenga todo el alumnado". Sobre los deberes y si se deben hacer en casa o en el colegio o instituto, recuerda la autonomía de los centros y profesorado "que saben adaptar en función del alumnado que tienen en su aula cómo llevar a cabo su programación".