4 de cada 10 cántabros cree que la situación económica de su hogar es peor que hace un año
Un 20,4 % de los encuestados han recurrido al pluriempleo para afrontar esas dificultades económicas

han recurrido al pluriempleo / SER Madrid Norte

Santander
Un 41,2 % de las personas de Cantabria encuestadas en la última Encuesta Social, que corresponde a 2022, señaló que la situación económica de su hogar había empeorado respecto al año anterior, y sólo un 9,8 % declaró que había mejorado.
Según los datos de esta Encuesta Social, que realiza el Instituto Cántabro de Estadística (Icane), la mayor parte de los encuestados, cerca de un 48 %, consideró que la situación económica de su hogar estaba igual que el año anterior, y hubo un 1,6 por ciento de personas que no contestó.
A la pregunta de cómo creen que evolucionará la situación económica de su hogar a un año vista, un 46,7 % piensa que estará igual, un 31,3 % considera que irá peor y cerca de un 12 por ciento augura que mejorará.
Un 72 por ciento de los encuestados ha declarado, además, que no ha tenido dificultades económicas en su casa en el último año, mientras que algo más de un 25 por ciento reconoce que sí y cerca de un 3 por ciento no contesta.
Para minimizar esas dificultades, la mayoría (56,4 %) optó por recortar gastos, mientras que un 8,5 % tiró de tarjeta de crédito y un 7,5 % liquidó inversiones para obtener liquidez (acciones, planes de pensiones, otro patrimonio).
Un 20,4 % de los encuestados han recurrido al pluriempleo para afrontar esas dificultades económicas y en el caso de un 31,4 % se produjo la incorporación al mercado laboral de algún miembro del hogar que no trabajaba.
Más de un 22 por ciento pidió ayuda a su familia, un 21,7 por ciento solicitó ayudas de carácter social, un 8,7 por ciento pidió un préstamo o crédito bancario, y más de un 3 % recurrió a otras prácticas que no se detallan.