Menos niños en Canarias y malas condiciones: el mapa de la natalidad en las islas

Canarias

En Canarias, han bajado un 13 por ciento los nacimientos en el último año. De cada 100 niños que nacen en el territorio nacional, 4 lo hacen en el archipiélago. Son los últimos datos del INE que demuestran que la pandemia no ha hecho que remontemos en este tipo de decisiones. En 2020, 950 alumbramientos diarios, en comparación con los 1104 de media en 2016. Aunque haya subido ligeramente la cifra el año pasado, ha vuelto a descender en 2023.

Cuando más nacimientos se registraron, en 1974, llegaron al mundo más de 164.000 bebés en toda España, más del doble que en la actualidad. Esto se comprende si tenemos en cuenta todas las circunstancias que rodean la actualidad de las islas.

Somos más, pero con menor poder adquisitivo y más envejecidos. Canarias ha crecido en casi 2.000.000 de personas en un siglo. El censo de 1897 del INE recoge 300 mil habitantes en lo que se conocía como la provincia de Canarias.

En 1970, ya había un millón 170.000 y en 2022, más de 2.172.000 ciudadanos. En 52 años, más gente, pero con unos 85 años de esperanza de vida y un claro trasvase de la población de las islas verdes a las capitalinas.

Y mientras, si nos referimos a las condiciones de vida, en concreto al desempleo en los más jóvenes: los registros de paro juvenil se remontan a 2002 en el INE, en ese año había un 18%. El pico se alcanzó el cuarto trimestre de 2012, cuando llegamos en las islas casi al 70% de desempleo en menores de 25 años.

Volvieron a resurgir esas altas cifras durante la pandemia, y no nos hemos recuperado, porque ahora estamos en un 36,42% de paro en menores de 25 años.

Mientras, 1 de cada 3 ciudadanos vive en riesgo de pobreza en las islas, el 36,6% del total. 286.000 están en situación de pobreza severa.

Aunque tengamos la mitad de nacidos que en los años 70, el saldo sigue siendo positivo por la cantidad de gente extranjera que reside en el archipiélago. Las consecuencias según los expertos podrían residir en la manera en que tengamos en cuenta nuestra situación como sociedad y cómo afrontemos la presión de las pensiones a largo plazo.

A esto hay que añadirle que, en muchos casos, aunque haya trabajo, hay personas que no llegan a fin de mes. Es decir, aunque se hable de más empleo, en ocasiones no significa que esas familias tengan mejores condiciones de vida.

Todo esto se añade a que las mujeres siguen siendo las principales caras visibles de la vulnerabilidad y las tasas de pobreza y, además, las principales afectadas si tuvieran que conciliar. El 85% de ellas son las principales cuidadoras, según un estudio a nivel nacional de la Fundación Santa María La Real. Muchas, incluso, no cogen sus trabajos porque no tienen tiempo para cuidar de sus hijos, si es que han decidido tener uno.

Los expertos insisten: las prestaciones en las islas no son suficientes. 'Tampoco hay un sistema integral que garantice que esas personas puedan tener hijos', dice María Flores, de la Asociación "A ti mujer", que atiende en Telde a mujeres vulnerables.

Lo mismo asegura Aniano Hernández, responsable de Modernización en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y antiguo técnico estadístico del Gobierno de Canarias. 'Podemos decidir entre apostar por políticas que realmente incentiven el tener hijos o seguir con esta actitud laxa'.