Lanzarote busca un impulso al prestigio mundial del Túnel de la Atlántida

El Geoparque Mundial de la UNESCO Lanzarote y Archipiélago Chinijo colabora con el equipo investigador del Túnel de la Atlántida que lidera el catedrático de Geodinámica de la UNED, Javier Lario, y que el pasado mes de octubre presentó en la octava edición del Congreso Español sobre Cuevas y Minas Turísticas los hallazgos que se han hecho hasta el momento en la cavidad conectada al túnel de La Corona. El equipo investigador participó en Cuevatur 2022 mediante iniciativa propia, con el objetivo de poner en valor a las características y especies que habitan en el mayor tubo volcánico de estas características del planeta, con 1.600 metros de longitud total y unos 64 metros de profundidad máxima. Lario explica que «nosotros llevamos una propuesta, aunque el Túnel de la Atlántida tiene un interés internacional, es el túnel sumergido más grande del mundo, tiene un interés tanto geológico como biológico mundial, porque tiene más de 30 especies autóctonas, el conocido Jameito es quizá el más característico, y queda mucho por investigar, o sea que se pueden encontrar todavía muchas más especies. Tanto por sus valores biológicos como geológicos, lo que hicimos es una propuesta para que el túnel individualizado, fuera del túnel de La Corona, es decir, el Túnel de la Atlántida por sí solo, sea un punto de interés geológico a nivel mundial». Es por ello que respaldaron su propuesta apuntando a «la morfología, la geomorfología volcánica especial asociada, los sedimentos que hemos estudiado y que nos dan una información» y aunque reconoce que «está claro que no es muy visitable, no va a ser muy turístico para que entre la gente», sí considera que «puede complementar muy bien toda la visita a los Jameos o a la Cueva de Los Verdes que está al final relacionada con el Túnel de la Atlántida». Para lograrlo, explica el Catedrático de Geodinámica de la UNED, «nosotros damos los datos científicos, y debería haber un apoyo institucional, que lo estamos teniendo por parte de Geoparque, para que realmente esta figura tan importante a nivel mundial se le de mucha más promoción». Lario recuerda que «la última campaña la tuvimos en noviembre, es cuando aprovechamos para dar una charla en la sede de la UNED en Arrecife. Normalmente hacemos tres o cuatro campañas al año, porque hay que ir en unas condiciones muy determinadas de las mareas para poder entrar con seguridad. En estos años, lo que hemos podido hacer es realizar investigaciones geológicas en el túnel que no se habían realizado hasta ahora, había mucha investigación biológica, y se habían sacado datos bastante importantes sobre las especies únicas que tiene el túnel, pero no había investigaciones geológicas. Hemos estudiado los sedimentos, minerales, y espeleotemas, y hemos podido hacer una reconstrucción paleo-ambiental desde que se formó el túnel más o menos hasta la actualidad, es decir, de los últimos 20.000 años». Reconoce y agradece «el apoyo del Geoparque, le ha gustado mucho lo que hemos estado haciendo», y anuncia que «presentamos una propuesta para poder seguir trabajando en el túnel, en este caso monitorizar a largo plazo las condiciones de temperatura y salinidad del túnel, para ver si hay algunos intercambios de agua. Es algo que nos interesa a nosotros para ver temas de precipitados de minerales y cómo han evolucionado en el túnel, pero es algo que interesa también mucho a los biólogos que trabajan en el túnel, porque esto es un ecosistema singular, que tiene una roca soporte, unos sedimentos, y una fauna que vive dentro de ese ecosistema, todos los datos que saquemos nos van a valer a todos». Además, explica que «es interesante que esto siga en el futuro porque el tubo volcánico y sus características de aislamiento en relación al mar puede valer para ver tendencias de cambio climático, no interferenciadas por corrientes o insolación que pueden alterar algunos datos».

Lanzarote busca un impulso al prestigio mundial del Túnel de la Atlántida

Geoparque Lanzarote y Archipiélago Chinijo trabaja junto al equipo investigador liderado por el catedrático de Geodinámica de la UNED, Javier Lario

Érica Cerdeña