Más de un centenar de funcionarios reclama frente al Consolat de Mar la actualización del plus de residencia

Palma

Alrededor de 150 personas se han concentrado este sábado frente al Consolat de Mar para exigir unos servicios públicos de calidad; concretamente, reclamando que se actualice el complemento de indemnización de residencia en el sector público de Baleares. Convocada por UNISEP, Plataforma por la Igualdad de los Servicios Públicos, también ha habido protestas en Ibiza, frente a la Casa del Mar, y en Menorca, en la plaza de la Miranda. En las concentraciones han estado presentes sindicatos médico, enfermero, de la Educación, policiales o de la Guardia Civil.

Miguel Lázaro, una de los portavoces de UNISEP, ha subrayado que "la calidad del servicio público, en general, se está deteriorando en las Islas" y ha lamentado que el Govern no haya querido escucharles en los últimos años. "Reclamamos que la indemnización de residencia se actualice, cosa que no pasa desde 2007. Esa equiparación a Canarias, Ceuta y Melilla nos permitiría incentivar a todos aquellos sanitarios, profesores, policías, etc. que estén por venir a Baleares", ha indicado.

Como presidente del sindicato médico SIMEBAL ha comentado al respecto de su profesión que "faltan alrededor de 300 médicos en la Atención Primaria y unos 450 o 500 en los centros hospitalarios porque no se fideliza a los trabajadores que llegan de fuera". Ha recordado que eso se traduce en un peor servicio al ciudadano y en largas listas de espera. "La solución para captar y fidelizar está en aumentar la incentivación retributiva, en la equiparación, y la no retributiva, abordando los puestos de difícil cobertura", ha explicado.

Por otro lado, Sergio Tortosa, vicesecretario autonómico del sindicato de enfermería SATSE, ha señalado que "si a la no actualización le sumas la carestía de la vida en las Islas y que Baleares no genera la cantidad de enfermeros que necesita, nos da un escenario en el que es imprescindible que venga el peninsular que ya no quiere venir aquí".

Ha concretado que son 78 euros lo que perciben como complemento de residencia y que, como salario final, cobran 500, 600 y hasta 800 euros menos al mes que en otras comunidades que cuentan también con este plus y que fidelizan a sus profesionales. "Más que actualizar la cuantía al IPC, lo necesario es revisar ese complemento, el cual, lamenta, ha perdido ya todo el sentido", ha lamentado.