1-0. La UD Ibiza tampoco suma en el campo del Villarreal B

Ibiza

Pasan las jornadas y los puntos vitales que necesita la UD Ibiza no suman en su casillero. Tampoco ante el Villarreal B, un equipo que juega muy bien al fútbol, que ha sido mejor en el cómputo global del encuentro y que ha sabido aprovechar una de sus ocasiones, en una de esas jugadas que retratan esta temporada los agujeros en defensa.

De todas las fechas marcadas hasta ahora como claves en el calendario para reaccionar no se ha conseguido salir con un triunfo que cambie la dinámica tan negativa en la que está inmerso un equipo al que le falta imaginación en ataque y le sobra siempre alguna acción mal defendida que cuesta un gol. Son ya ocho partidos seguidos sin ganar desde el triunfo ante el Lugo el pasado 2 de octubre. No todo es cuestión mental, hay una falta evidente de ideas ofensivas, el talento escasea, y ya se sabe que sin goles no hay paraíso.

Anquela dejó el tiempo de experimentos y ha optado por el once que parece más lógico a estas alturas de la competición, con Isma Ruiz y Diop como medio centros y Appin apoyando en la medular escorado a la izquierda, dejando como enganches a Ekain y Herrera y a Castel como atacante solitario. En el centro de la zaga ha recuperado a Juan Ibiza, tras su lesión formando pareja con Goldar y los laterales eran Coke y Javi Vázquez.

En el primer tiempo, la iniciativa ha sido amarilla, porque a la UD le costaba salir de la presión avanzada que hacían los locales, no encontraba a su pareja de medios y el único recurso eran los balones largos buscando a Castel. Así que, la pelotada era casi siempre del Villarreal B y el dominio local propiciaba oportunidades, creando juego y desbordando sobre todo por fuera donde tanto Javi Vázquez como Coke sufrían y no siempre tenían la ayuda de los centrocampistas. En los laterales ha estado el gran problema defensivo en el primer acto, porque se dejaban ganar la espada con facilidad.

El portero visitante Fuzato estuvo providencial a los 10 minutos para rdechazar un disparo a bocajarro de Fer Niño y poco después tuvo que poner otra mano salvadora para repeler un disparo desde la frontal de Del Moral. Fuzato ayudó a que la UD llegara al descanso con su portería a cero.

El Ibiza no tenía una salida limpia de pelota, porque el Villarreal asfixiaba con la presión así que optó por los desplazamientos en largo, siempre por la izquierda buscando el poderío físico de Appin o las incursiones de Javi Vázquez con centros al área que no encontraban rematador. Y en el juego directo fabricó la primera ocasión peligrosa, con un pelotazo de Juan Ibiza que bajó Castel desde la frontal y su latigazo se fue muy cerca de la escuadra de Jörgensen. El delantero centro de la UD peleó bien con los centrales, pero es una isla solitaria en ataque.

El choque se equilibrió, aparecieron más los centrocampistas visitantes y el Ibiza estuvo muy cerca del gol en los últimos minutos del primer tiempo. Una falta sobre Ekain desde la banda derecha del ataque ibicenco la lanzó con maestría Cristian Herrera y respondió con un paradón espectacular Jörgensen. Los porteros fueron protagonistas del primer acto.

En la reanudación lo intentó de nuevo la UD a balón parado, pero el cabezazo de Diop se fue alto. Los visitantes parecían tener más control, pero volvieron a dar facilidades atrás en una acción en la que bastó un pase en la zona ancha, ganando la acción al marcador ibicenco para dejar una autopista libre a Tasente por banda izquierda que llegó hasta el interior del área y disparó con rechace de Fuzato, dejando el balón a placer a Collado que acompañaba la acción y solo tuvo que empujar al fondo de la red. Quedaban 35 minutos, pero ya se ha visto esta temporada que cuando los ibicencos se ven por debajo en el marcador no tienen capacidad de reacción y ven tan alta la montaña como escalar el Everest.

Lo intentó el conjunto de Anquela con un disparo de falta que se fue alto o en una acción de Castel, pero también las tuvo y más claras el Villarreal B para sentenciar el encuentro. El técnico de la UD buscó el desequilibrio con la entrada de Suleiman y algo de más control en la zona ancha con Morante. Pero no cambio mucho la dinámica de un partido que siguió el guión de toda la temporada en un quiero y no puedo. Los locales se quedaron diez en los compases finales por la expulsión de De La Fuente que vio dos amarillas y Anquela seguía moviendo el banquillo con la entrada de Bogusz y Miki Villar. Seguía seco el Ibiza en ataque así que el gato al agua se lo llevó el Villarreal B, que en tiempo de prolongación desaprovechó una pena máxima cometida por Isma Ruiz a Lozano, que detuvo Fuzato. No hubo tiempo para más, fue superior a los puntos el conjunto amarillo ante un Ibiza que mejoró algo su imagen, pero que sigue sin encontrar la fórmula para ganar, las ideas para amenazar en ataque y ve el futuro cada vez más negro, hundido en las posiciones de descenso.