Una gran tormenta de agua y granizo afecta y anega cientos de hectáreas en el Somontano

Huesca

La zona de Monte Odina, en el Somontano, con las localidades de Ilche, Morilla, Monesma, Fonillos o Permisán, ha sido la más perjudicada por una fuerte tormenta que llegaba a primera hora de la tarde de este jueves y, tras pasar, regresaba horas después, acompañada de granizo, y en la que se calcula que habrán caído más de 100 litros de agua por metro cuadrado. Calles, caminos, carreteras, barrancos y campos están completamente anegados y los desagües desbordados. La piedra afectaba a cientos de hectáreas, especialmente de cereal.

José Luis Romeo, presidente de la Comunidad de Regantes de la Val de Alferche de Ilche indicaba que el granizo rompía los pluviómetros cuando se llevaban más de 100 litros recogidos, y que a última hora de la tarde continuaba lloviendo con gran intensidad.

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Aseguraba que pueden estar afectadas en torno a 7.000 hectáreas de campos, aunque habrá que esperar a este viernes y a que se vaya el agua que los cubre para empezar a valorar los daños que se hayan podido producir.

Además, la carretera que une Ilche y Fornillos también resultaba inundada y se hacía impracticable para poder circular en algunos tramos por ella.

También la tormenta acompañada de granizo llegaba a la zona entre Lagunarrota y Monesma, donde caían 120 litros de agua. En este caso los daños se han dado principalmente en cultivos de cebada de regadío.

En municipios de Ribagorza, la tromba de agua también provocó afecciones

En la Comarca de Ribagorzana, Perarrúa llegaba registrar 100 litros en poco más de una hora, lo que provocaba la inundación de algunas casas, así como del camping, que quedó anegado casi en su totalidad. También se produjeron algunos desprendimientos e incluso se tuvo que utilizar la máquina quitanieves para limpiar de la carretera A-139 entre Santaliestra y Perarrúa la piedra que había caído.

Con menos consecuencias, la lluvia también pasó por Capella, donde caían unos 50 litros, y por Benabarre, con 20 litros. Además, el caudal del río Isábena aumentaba de 2 a 20 metros cúbicos por segundo en unas horas.

Pomar de Cinca, la gran afectada en el Cinca Medio

Ya por la noche, se produjo el desbordamiento del barranco de La Clamor, que desemboca en el Cinca, río que atraviesa el casco urbano de Pomar. El cauce se desbordó, causando destrozos materiales en la localidad. Casi una decena de viviendas afectadas, edificios públicos como la casa de la cultura se inundaron, y otros puntos, como el parque o el merendero, quedaron totalmente anegados. Además, el caudal del río arrastró uno de los puentes de Pomar, y en otro de ellos, se tuvo que cortar el tráfico de la A-130.

Durante la noche se vivieron momentos de tensión, sobre todo, cuando varias viviendas tuvieron que ser desalojadas ante la amenaza del agua. "Los bomberos del SPEIS rescataron a varios vecinos que quedaron atrapados en el piso superior de dos viviendas" señalaba la alcaldesa, Elisa Sancho. "Gracias a su actuación, no hay que lamentar ningún daño personal" añadía.

También se inundó el colegio electoral, lo que obligará a cambiar de sede para que los vecinos puedan pasar por las urnas el próximo domingo.

El agua arrastra dos puentes en los caminos rurales de la zona de Selgua y Monesma

Los 110 litros de lluvia por metro cuadrado caídos en la jornada del jueves en la zona de Monesma y Selgua ocasionaban daños en los caminos rurales donde se han destrozado dos puentes en dos puntos distintos (La Granja El Trinquetero y Monte Lax II), tras colmatarse las clamores de la zona.

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Técnicos de la Confederación Hidrográfica del Ebro han visitado este viernes la zona afectada ya que será la CHE la que posiblemente tenga que actuar en la reparación.

Efectivos de la unidad Rural de la Policía Local, ha explicado el concejal de Servicios del Ayuntamiento de Monzón, Salvador Sarrado, “están en la zona donde ha colocado la señalización pertinente para que nadie circule por los caminos cortados hasta que se reparen por la CHE, así que mientras tanto pido precaución y respeto a la señalización para evitar cualquier tipo de incidente”.